Lima, 20/04/2009 (CNR) -- El "Bono 6000" que el Ejecutivo repartió entre los damnificados por el terremoto de agosto del 2007 "no sirve para nada", aseguró el ex gerente general del Fondo para la Reconstrucción del Sur (FORSUR), Luis Hernández.
En declaraciones a la Coordinadora Nacional de Radio (CNR), Hernández Huaranca indicó que la entrega del citado bono no ha contribuido de manera efectiva a resolver los problemas de vivienda poblacional entre los afectados por el sismo.
"Con el (Bono 6000) no van a construir una casa, es muy simple. Seis mil soles no es nada, no se puede hacer casi nada", dijo el ex funcionario, quien -además- reconoció que los más de 72 millones de nuevos soles repartidos entre los damnificados no siempre tuvieron como destino la rehabilitación de sus casas.
A esta circunstancia, se sumó la informalidad y viveza criolla de algunos que trataron de aprovecharse de la tragedia. "Lamentablemente, donde eran 30 mil, aparecieron 90 mil (damnificados)".
En ese contexto, consideró que el régimen de turno debió optar por impulsar programas de vivienda masivas, como se hizo en gestiones previas. Sin embargo, resaltó que la entrega de bonoa tuvo una buena intención. "Era parte de resolver la problemática", subrayó.
Así mismo, indicó que optó por presentar su renuncia irrevocable la semana pasada debido a razones de índole profesional; no obstante, después reconoció que fue por la serie de cuestionamientos a la institución "que no ayudan a este proceso. En lugar de orientar para que poblacion esté tranquila y pueda entenderlo".
Indicó que hubo "mala intención de las autoridades de Ica, que en vez de fortalecer al FORSUR, desde el primer día lo criticaron y atacaron". Hernández hizo especial énfasis en las críticas vertidas por el presidente del Gobierno Regional de Ica, Rómulo Triveño, quien a pesar de ser parte del directorio del FORSUR "siempre enfilaba su puntería (...) paras cuestionar algo que el mismo sabe: lo difícil del proceso".
Respecto a la lentitud en las tareas de reconstrucción, aseveró que esta percepción responde a un problema de difusión. "Acá se ha creído que 24 meses después de un terremoto todo puede estar puesto de nuevo (en pie)".
De otra parte, calificó como "totalmente falso" que el FORSUR sirva como una agencia de empleos para los militantes del partido de gobierno. "Puedo demostrar que de los 18 profesionales que ingresaron a trabajar a Ica, desde el traslado de la sede, ninguno tiene filiación aprista. Son cuestionamientos infundados", remarcó.
Descartó también la existencia de supuestas "planillas doradas", al poner como ejemplo que su sueldo alcanzaba los 13 mil nuevos soles."No es que a mí me regalaron el cargo, Yo tengo mis propias competencias, capacidades, estudios. Este es un puesto que nadie quiere, excepto algunos que quieren entrar alli por las reumenraciones", anotó.
Por último, Hernández Huaranca aseveró que la principal falla está en el propio FORSUR que no supo, desde el comienzo, informar a la población respecto a cuánto van a durar las tareas de reconstrucción."Esto va a tomar tres años, cinco años, esto se va a hacer por etapas. Ahora estamos entrando al segundo año, más la presión de la propia necesidad, mas la falta de objetividad del periodismo para enfocar. Se necesita ser especialista en el tema. No es cuestión de agarrar un micro o saber leer una noticia. Es un tema muy técnico y político, naturalmente".
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